Sabíamos que era sólo cuestión de tiempo, para que dejara sobre su cama una carta de seis macabras líneas y se largara (tal vez) para siempre. Con una botella de vodka a medio abrir y una caja de cigarrillos (de esos que fumaba por las noches, y dejaba su ropa impregnada a tabaco por las mañanas).
Así era (es) mi Selene.
Arlina Way Lestrange Nov 19, 2011 03:46 PM
ResponderEliminarSe a lo que te refieres... Escapar de tu casa... Pucha amiga !!! Que lata estar trabajando tan lejos, como para juntarnos en un café de mala muerte (StarBucks o Juan Valdez) y conversar de la vida...
Te quiero !