domingo, 19 de mayo de 2013

Era un viernes por la mañana, llegaba tarde para variar a clases de comunicación escrita. Estabas sentado solo en las primeras filas, la verdad no te había visto antes - aunque ya se cumplían unas semanas de clases pero sí prestaba atención cuando decían tu nombre en la lista sin saber que eras tú- me gustaron tus ojos y no dudé en sentarme en la silla de al lado. No fue hasta que el profesor nos hizo trabajar en duplas que nos hablamos, sonreímos nerviosos. No sabría decir si  me gustaste desde el primer momento, pero que fueras tan tímido,  que apenas podías  mirarme a los ojos, tus movimientos algo titubeantes y  que te sonrojaras cuando yo lo hacía, son cosas que probablemente nunca olvidaré.
Cuando llegué a casa y te vi conectado, abrí tu ventana y escribí "hola" pero no lo envié pensaba si era culpa de mi ansiedad querer hablarte enseguida, e instantáneamente recibí un "hola" de tu parte, algo cómico ahora sabiendo  que te ocurrió lo mismo. Viendo tus fotos descubrí que tenías novia, pero eso no me importó, quería que formaras parte de mi vida como fuese. 

Debo dejar de escribir de ti.

No hay comentarios:

Publicar un comentario